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Cuidar la piel de tu mascota en invierno

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¿Eres de los que se pregunta si los perros pasan frío? ¿Te preguntas si tienes que ponerle un jersey a tu perro cuando sale a la calle durante estos meses?

El invierno es una época del año en la que nuestra piel suele sufrir más debido al frío, la sequedad y el viento. Pero nuestros perros también sufren los efectos del invierno en su piel, por lo que es importante prestar atención a sus necesidades especiales durante esta temporada.

Los perros están protegidos por una capa de pelo y grasa en la piel que actúa como protector térmico, pero aun así puede no ser suficiente y que el frío penetre en nuestro perro. La raza y el tipo de pelo van a influir en si los perros tienen frío en invierno o no.

La piel de tu perro es su sistema de protección natural contra el medio ambiente y es importante cuidarla, especialmente en invierno. A continuación, te presentamos algunos consejos para mantener la piel de tu perro sana y protegida durante este frío y seco período del año.

Consejos para mantener la piel de tu perro sana

1.       Baña a tu perro con regularidad, pero no lo hagas demasiado seguido. El agua caliente puede resecar la piel de tu perro, por lo que es mejor usar agua tibia asegurándote de enjuagar bien después de lavarlo. También es importante utilizar un champú específico para perros que no contenga ingredientes irritantes.

2.       Protege a tu perro del viento y del frío. Aunque algunos perros son más resistentes al frío que otros, es importante protegerlos de las bajas temperaturas y el viento. Puedes hacerlo proporcionándoles una camita caliente y cómoda dentro de casa, y también puedes vestirles con ropa especial para perros cuando salgan a pasear. La ropa debe permitir libertad de movimiento y tiene que ser cómoda, sin apretar ni estar demasiado holgada. Por otra parte, es imprescindible que esté confeccionada con los tejidos adecuados.

3.       Reduce los paseos de tu perro: para que tu mejor amigo pueda conservar la temperatura corporal no es recomendable que pasee largos periodos de tiempo en la calle cuando el frío sea extremo.

4.       Si llueve, nieva o hay demasiada humedad y tu perro llega mojado a casa, es importante secarlo bien para prevenir cualquier tipo de resfriado o catarro. Aparte del lomo y la cabeza, tenemos que fijarnos bien en secar las patas, el pecho y las axilas.

5.       Otra forma de mantener la piel de tu perro hidratada es a través de su dieta. Consulta tu veterinario qué alimentos son más convenientes para mantener su piel suave y flexible.

6.       A través del uso de cremas y lociones especiales para perros protegerás la piel de tu perro. Estos productos ayudan a mantener la piel hidratada y protegida del viento y el frío. Aplica la crema o la loción en las áreas más expuestas del cuerpo de tu perro, como patas, orejas y barbilla, y asegúrate de frotarla bien para que penetre en la piel.

7.       Consulta a tu veterinario. Si notas que la piel de tu perro está seca, agrietada o con problemas, es importante que acudas a tu veterinario. Puede ser necesario cambiar la dieta de tu perro o proporcionarle suplementos especiales para mejorar la salud de su piel.

El primer consejo que os damos para cuidar la piel de tu perro, es bañarlo con regularidad, pero no demasiado seguido.

Una vez has decidido bañarlo, hay que hacerlo con cuidado para que no sufra de frío y no se le seque la piel.

Consejos para bañar a tu perro en invierno

Os presentamos unos consejos para bañar a tu perro en invierno:

1.       El baño de tu perro debe ser siempre en interior y no en exterior, ya que si el invierno es muy frío la piel de tu perro podrá sufrir con más facilidad.

2.       Antes de acabar con el baño, prepara las toallas que vayas a utilizar para que el perro no esté mucho tiempo expuesto al frío.

3.       Utiliza agua templada para bañar a tu perro, no es recomendable pasarse con el agua caliente y, menos fría, cosa que en verano si será posible.

4.       Intenta bañar a tu perro en horas diurnas y no por la noche. Y, sobre todo, no le bañes poco tiempo antes de salir de paseo.

5.       Si no es posible lavar a tu perro en una bañera o recipiente, puedes utilizar champú seco para eliminar el exceso de olores y absorber la grasa y suciedad.

6.       Si quieres echarle colonia a tu perro, recuerda: utiliza únicamente agua de colonia específicamente para perros para no hacerle daño en la piel.

En Vetoquinol nos queremos asegurar que tu perro esté siempre en las mejores condiciones, por eso, aparte de aconsejarte, hemos desarrollado un producto que acelera la regeneración natural de la piel de tu mascota.

Nuestro producto Phovia, mediante una lámpara multiled y a través de la energía lumínica FLE (fluorescent light energy), ayuda a que los perros y gatos se recuperen de los daños en la piel lo antes posible y así contribuir a su bienestar.

Ahora que ya sabes cómo cuidar de la piel tu perro en invierno, sal a divertirte con tu mejor amigo y, con un mínimo de cuidado, no tiene porqué pasarle nada a tu fan número uno. 

 

Consejos y trucos

  • Una alergia ocurre cuando el sistema inmunitario responde de manera excesiva a un determinado elemento externo, en este caso conocido como alérgeno. Un alérgeno es, por tanto, una sustancia o cuerpo responsable de una respuesta inmunitaria inapropiada, mientras que esta respuesta normalmente es inofensiva y se supone que protege al cuerpo. Las alergias son comunes en los perros y pueden tener diversas causas. Dependiendo del alérgeno, se pueden utilizar diferentes estrategias.

  • Los riñones son órganos importantes en el cuerpo porque son responsables de filtrar la sangre. 

  • ¿Tienes un perro en casa y un bebé en camino? ¡Fantástico! Muchos estudios han demostrado que tener un perro podría tener un impacto muy positivo en la vida de tu bebé. Sin embargo, es importante preparar a tu mascota para este gran cambio en vuestras vidas, para asegurar que vuestra nueva vida familiar se desarrolle bien. Para hacerlo, necesitas intentar establecer algunas nuevas normas antes de la llegada del bebé para facilitar esta transición.

  • El periodo principal de aprendizaje para tu cachorro es entre los dos y los cinco meses de edad. Durante este periodo, tu cachorro será especialmente receptivo a las órdenes y recompensas, pero también será impresionable; no te apresures. Tu objetivo debe ser entrenar bien a tu cachorro, mientras le ayudas suavemente a entender su entorno.

Invierno, perro

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